“Hermosa labor ejecuta la sociedad de cuidados paliativos a la cual me honra pertenecer”

31-01-2023 | Loreto Barrientos Mansilla

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Con la idea de conocer y destacar los diferentes trabajos de las unidades de Cuidados Paliativos de nuestro país, conversamos con la Dra. Nilqger García, médico jefe/referente de Unidad de CP Hospital de Linares, quien nos contó desde su experiencia a las anécdotas que han vivido.

El inicio de actividades del policlínico del dolor se realizó entre 1996-1997. En el hospital de Linares había una consulta de paliativos desde que a nivel nacional se crea el programa, y que fue atendida inicialmente por anestesiólogos o médicos, una enfermera y TENS. Desde el año 2017 estuvo conformada por dos médicos anestesiólogos y luego por jubilación de uno de los mismos quedó a cargo de  un médico especialista en cuidados paliativos que actualmente es el jefe de la unidad  y médico encargado del programa.

Con respecto a la experiencia, según declara la Dra. Nilqger García: “la formación de la unidad ha sido un arduo trabajo en equipo, que gracias al apoyo de los directivos de la institución/CDT y del Ministerio de Salud ha podido ir adquiriendo nuevos recursos humanos, materiales y ampliando el equipo; transformándose de una consulta de alivio del dolor a ser una unidad con un equipo interdisciplinario  (2017).

En el 2022 fueron atendidos aproximadamente 1.100 pacientes, con 370 nuevos ingresos. Diariamente la jornada es variable, pero pueden atenderse entre 16 y 23 pacientes aproximadamente, esto también incluye atención presencial, de urgencias, telemedicina y domiciliaria”.

¿Quiénes conforman el equipo?

Somos un equipo interdisciplinario que consta de:

-Dra. Nilqger Garcia; médico anestesiólogo especialista (postgrado y magister) en dolor agudo, crónico oncológico/no oncológico y cuidados paliativos, con 22 años de experiencia. Es el médico encargado del programa de cuidados paliativos actualmente y que trabaja en la unidad desde el 2017.

- Valeska Gatica, enfermera con maestría en cuidados paliativos, con 5 años de experiencia.

- Sara Guerrero, enfermera recién incorporada a la unidad.

- Vilma Quiroz, nutricionista con 10 años de experiencia en paliativos. 

- Vicente Varela, psicólogo con magister en psicología clínica con 20 años de trayectoria y amplia experiencia en manejo de duelo. Es parte de la unidad desde 4 años.

-2 TENS: Una de ellas es Gabriela Ortega con formación en oncología. 

- Dra. Isabel Pezoa, apoyo médico familiar en telemedicina, quien actualmente está en formación de paliativos. 

- Un trabajador social y farmacéuticos. 

Fortalezas del equipo 

“Dentro de nuestras fortalezas consta el trabajo en equipo, buena comunicación bidireccional y horizontal, atención de paciente y las familias; superamos las debilidades tomando en cuenta las oportunidades que se nos presentan, tenemos estructura y organización. Realizamos una constante evaluación de los desempeños para mejorar y optimizar el desenvolvimiento de nuestras actividades, existe una  formación continua y actualización tanto del equipo que lo conforma como del personal paramédico y profesional de APS, para mejorar la calidad de atención.

El equipo cuenta con gran calidad humana y empatía en la atención del paciente y familia. Se realiza autocuidado del equipo para evitar el burnout laboral. Se brinda un apoyo biopsicosocial a los pacientes y sus familias, así como apoyo durante el proceso de duelo.

Dentro de la unidad se realiza una atención integral a nuestros pacientes, se realiza educación a ellos y sus familias, se procura adaptar los planes terapéuticos a los recursos disponibles y en base a las necesidades del binomio pacientes/familia del Linares y zonas de influencia rurales. Existe colaboración con otras unidades como la APS, urgencia, GES, oncológica y gestión oncológica, farmacia, trabajo social, medicina interna y los servicios quirúrgicos. 

Se educa a la familia en el ingreso de cómo debe hacer en caso de urgencia y cuáles son las mismas.

Igualmente, el médico encargado de la unidad dicta docencia en cuidados paliativos desde el 2017 a los becados de medicina familiar de la Universidad Autónoma de Talca, quienes colaboran con desde el punto de vista asistencial y educativo, formando parte importante de la misma. Además, se lleva un registro de todas las actividades y censo de pacientes ingresados y de visitas domiciliarias, se registra una evaluación inicial, quincenal y mensual de las necesidades y en pacientes complicados puede ser evaluación semanal.

Se realiza la evaluación del estado de dependencia, se define un plan de cuidados y apoyo para las familias, así como el plan farmacoterapéutico. Además, la unidad cuenta con una guía de acogida del paciente y su familia con información importante sobre cómo manejar la etapa de fin de vida y sobre la nutrición y apoyo que debe recibir.

Se realiza manejo de apoyo psicológico seguimiento, contención, duelo, medidas de intervenciones psicológicas en casos específicos, psico educación, seguimiento telefónico y presencial del psicólogo. 

El equipo ha tenido que desarrollar la capacidad de flexibilidad y adaptación a las  condiciones de espacio físico y los recursos materiales que tenemos, usando la creatividad para obtener el máximo provecho, el logro de objetivos y poder  brindar una atención de calidad”.

Respecto del trabajo y la implementación a futuro de la ley CP sostiene que: “La puesta en marcha de la ley de CP universales amerita un trabajo arduo por parte de todos los implicados, se necesita ser creativo y reinventarse en base a la oportunidades y recursos disponibles, requiere de reorganización para cubrir el alto volumen de pacientes que estaría por llegar, valorar la posibilidad de cómo obtener mayor recurso humano y materiales para cubrir las necesidades y de una mejoría en la comunicación/difusión  de la información con los equipos de paliativos a nivel nacional  de sus lineamientos.

En la unidad de CP de Hospital de Linares nos estamos reorganizando para brindar educación sobre CP universales a las APS. A nuestro criterio, sería oportuno que existiera una mayor difusión y comunicación de los lineamientos de la Ley, con las autoridades responsables de conseguir recurso humano y material, para cubrir la creciente demanda de los pacientes que se nos avecina a todas las unidades a nivel nacional.

Para nosotros, la piedra angular para que exista un funcionamiento óptimo y eficaz de toda la red nacional de CP es el trabajo en equipo con una comunicación bidireccional y continua.

Hay que procurar que los equipos de cuidados paliativos se completen como un equipo multidisciplinario e interdisciplinario que incluya la parte espiritual, kinesiológica, terapia ocupacional y trabajo social. Actualmente nuestro equipo está ideando estrategias como difundir con los otros colegas  la información sobre la ley y su cobertura, pero aún estamos esperando que salgan los anexos del reglamento sobre las voluntades anticipadas y CP universales.

Igualmente sería  oportuno  y provechoso, que dentro de la ley se realizarán normativas para el autocuidado de los equipos, para así evitar el Burnout laboral en un área donde el equipo está sometido a una importante sobrecarga emocional”.

¿Han visto alguna reacción a raíz de la promulgación de la ley? (cuáles)

“A nuestro criterio, el personal médico, paramédico, pacientes y familiares aún se encuentran con una gran incertidumbre y muchas dudas. Existe poca información, divulgación y claridad sobre la implementación de la ley (especialmente en APS).

No están muy claro aún los criterios de ingreso a las unidades de CP no oncológicos, donde serán atendidos los CP no oncológicos y cuáles serán los pacientes que serán atendidos por las unidades de CP hospitalarias (criterios de inclusión) así como cuáles serán los recursos humanos y materiales estimadas en vista del aumento de la demanda exponencial que se va  a presentar en corto tiempo”.

¿Tiene anécdotas para destacar, cuáles?

“Estamos muy orgullosos y satisfechos de la empatía que existe por parte de los familiares y el agradecimiento que nos brindan al equipo, lo cual es manifestado a través de obsequios, plantas, felicitaciones escritas, ramos de flores e incluso nos han ofrecido animales de corral como manera de agradecernos, nos traen comida y en algunas ocasiones, sobre todo las personas del área rural con difícil acceso nos han esperado con un recibimiento especial, muy cálido con obsequios;  lo cual resulta muy satisfactorio emocionalmente para todo el equipo.

Dentro de las anécdotas no muy gratas, hemos visto con preocupación que la familia tiene un alto grado de desinformación al llegar a nuestra unidad, ansiedad y de estrés muy grande que se transforma en ocasiones en comportamiento agresivo que requiere de contención y que con frecuencia altera la funcionalidad de la consulta.

Otra anécdota muy satisfactoria que recordamos con mucha alegría se refiere a que una de nuestros pacientes de cuidados paliativos, gracias al apoyo del equipo multidisciplinario e interdisciplinario, tuvo la oportunidad de ser madre y actualmente su bebe tiene 9 meses”.

Para finalizar la profesional dice “existe mucha desinformación sobre las responsabilidades por parte de algunos equipos de APS, como colaboradores fundamentales con las unidades de CP y como parte importante en el organigrama del manejo de los pacientes terminales tanto oncológicos como no oncológicos. Considero importante difundir que la responsabilidad y el trabajo en equipo es lo más importante en miras a obtener la atención de calidad a nuestros pacientes y a sus familias”.